Este pasado puente, hemos pasado unos días estupendos en compañía de buenos amigos por la comarca del Río Arlanza, en Burgos. Además de disfrutar de cultura, historia y gastronomía, también hubo tiempo para la naturaleza, y aunque inmerso en un grupo de 11 adultos más y 4 niños, aún puedo rescatar un breve resumen de lo que observamos.
El ecosistema más extenso, es el sabinar, siendo de hecho uno de los mayores de Europa. La sabina (Juniperus thurifera) puede vivir en estos suelos calcáreos, con inviernos heladores y veranos abrasadores. En otoño, además ofrecen sus frutos a multitud de pajarillos, que a cambio, esparcen sus semillas.
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Sabinar de Santo Domingo de Silos |
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Zorzal charlo (Turdus viscivorus) amante de los frutos de la sabina |
A pocos kilómetros de Santo Domingo de Silos, el Desfiladero de la Yecla, se abre paso a través de un macizo calcáreo en el que los buitres leonados (Gyps fulvus) hacen sus nidos.
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Farallones con nidos de buitre |
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Grandes grupos de buitres sobrevuelan los acantilados |
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Buitre leonado en vuelo |
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Buitre leonado sobre un risco |
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Buitre aleteando para tomar altura |
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Buitre cicleando |
No sólo buitres deben anidar en las rocas, pero ese día sólo pudimos ver además un par de cuervos (Corvus corax).
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Cuervo alto en el cielo en el que se aprecia su enorme cola en forma de rombo |
En las zonas de humbría y vaguadas se deasarrollan bosques de hoja plana como quejigares y encinares, en donde el paisaje y sus habitantes cambia completamente.
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Quejigar de Hinojar de Cervera |
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Un carbonero común (Parus major) mira para otro lado |
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Por fin el carbonero se da la vuelta y me observa |
Finalmente, mencionar que en algún pueblo aún quedaba alguna cigüeña (Ciconia ciconia) que a pesar del frío que se avecina no ha emigrado. Debe ser que encuentra comida suficiente en algún vertedero
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Cigüeña blanca en su nido en Salas de Los Infantes |
Este viaje, dio para mucho más en otros aspectos, pero que no son objeto de este blog, sirva de recuerdo y dedicatoria para la agradable compañía, que hizo que no echase de menos más tiempo para pajarear.