Este fin de semana pasado hemos hecho un par de excursiones cortas pero productivas por Santorcaz. El primer día fuimos hacia el Carrascal y la segunda ave que fotografié fue una sorpresa porque llevaba tiempo sin verlo, un alcotán (Falco subbuteo). Los torcatos, sobre todo los mayores llaman alcotanes a los cernícalos primilla que criaban en la torre de la iglesia, pero el verdadero alcotán es un poco mayor y de formas más cercanas al halcón que al cernícalo y no crían colonialmente como lo hacían los cernícalos primilla en Santorcaz.
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Las alas en forma de guadaña son la característica del alcotán, un ave veloz pero menos robusta que el halcón |
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Se trataba de un macho, como muestra sus calzas rojizas en esta ampliación |
Antes del alcotán un jilguero (Carduelis carduelis) se posó cercano a nosotros sobre su alimento preferido y ya en el Carrascal vimos alguna que otra cosa también interesante.
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A pesar de ser frecuentes, no dejan de ser preciosos |
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Una lejana abubilla (Upupa epops) |
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Esta tórtola europea (Estreptopelia turtur) estuvo cantando un buen rato en su percha |
El domingo fuimos hacia los pinos y el Arroyo de la Dehesa, y en poco tiempo, nos entretuvimos con varias rapaces. De todas formas, al amanecer pude fotografiar algunas aves que utilizan nuestro jardín y que se dejaron acercar bastante.
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En las cuerdas de tender la ropa una golondrina (Hirundo rustica) |
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En los cables una paloma torcaz (Columba palumbus) |
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Bajo los pinos, esta hembra de pinzón (Fringilla coelebs) buscaba comida |
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Cerca del arroyo este aguilucho lagunero macho (Circus aeroginosus) con el plumaje algo estropeado |
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Otro aguilucho macho, pero esta vez uno cenizo (Circus pygargus) algo más pequeño y estilizado, hacía vuelos acrobáticos mientras reclamaba |
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Mi mujer me descubrió esta águila culebrera (Circaetus gallicus) |
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