Lo prometido es deuda, y vuelvo con una segunda entrada sobre buceo en Mazarrón. Esta vez es en la primera de una serie de playas vírgenes que hay al Sur de Puerto de Mazarrón: la Playa del Rincón, junto a la cueva de los lobos. El primer día que la visitamos quedé prendado de ella por sus aguas cristalinas y el paisaje que la circundaba. No hacía falta sumergirse en ella para poder ver los peces entre los pies, algunos de ellos muy conocidos por todos: lenguados y salmonetes.
Empiezo ya con una foto que me parecía imposible: dos de los peces más vistosos del mediterráneo y el invertebrado más inteligente, y aviso a los lectores habituales de que esta vez me saltaré los nombres en latín de aquellas especies que ya salieron en la entrada de la semana pasada.
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Un fredí macho con sus colores azules y verdes, y un barreado serrano,
acosan a un pequeño pulpo que intenta camuflarse en el fondo |
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Las vistas desde la playa también eran espectaculares, con acantilados y calas de todos los colores
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La playa es muy somera y el agua es cristalina. En una parte sólo hay arena |
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Sin apenas meter las rodillas todos pudimos ver un pequeño lenguado (Solea sp.)
intentando camuflarse para pasar desapercibido |
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Otro pez que se camuflaba estupendamente era este rasposo (gobius bucchichi) |
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En seguida, un poco más adentro y en los márgenes de los acantilados,
reaparecen las praderas de posidonia |
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Y en esas praderas, aparecen otros tipos de peces como las mojarras
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Además de posidonia también hay praderas de otras hierbas marinas menores,
y en esta foto aparecen lo que pueden ser pejerreyes (Atherina boyeri) |
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También entre esas hierbas nadan los peces como esta julia |
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En los fondos también se arrastran las holoturias (Holothuria tubulosa) |
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Aquí un raspallón nada entre posidonias |
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Este es un sargo, parecido al anterior |
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Aquí en la sombra una hembra de fredí y a la luz una mojarra |
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Este es un pez de fondo, una futarra (Lipophrys trigloides) |
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También de fondo es este salmonete de roca |
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En las rocas había esponjas y tunicados muy vistosos |
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Un tipo de anémona que sólo pude encontrar una vez fue esta Aiptasia mutabilis |
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Las anémonas más comunes son las conocidas como ortigas de mar |
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En unas cuevas a unos tres metros de profundidad, pude ver un grupito de
salmonetes reales (Apogon imberbis) con su llamativo color rojo |
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En la entrada de la cueva hay una ¿Flabellia petiolata? un alga verde con forma de abanico |
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Aquí en detalle se ven lo que parecen ser ascidias de Botryllus leachi
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Esto en cambio es una esponja naranja Crambe crambe |
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Esponjas y algas conforman unos paisajes subacuáticos también muy llamativos |
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Esta especie probablemente sea una Sarcotragus fasciculatus
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Desde esta vista superior se aprecian bien los poros por donde filtra el agua |
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Esta es una esponja negra ¿Sarcotragus spinulosus? |
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En pequeñas cuevas se cobijan las juveniles de las castañuelas (Chromis chromis)
destacan con su color azul metálico |
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Aquí un pequeño tordo de roca, en el centro, comparte espacio con unas castañuelas |
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Las lisas nadan por cuevas y espacios abiertos |
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Otro pez de fondo, una lagartina (Parablenius sanguinolentus) |
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Más peces de fondo: una pequeña escorpena (Scorpaena notata),
casi invisible, familia de los conocidos cabrachos |
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Un alga roja calcárea Titanoderma trochanter |
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Los serranos suelen nadar entre posidonias, pero también salen a las rocas |
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Las planchitas tienen colores muy variables según por donde se muevan, ésta es clara... |
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... y esta es más oscura. |
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Una mojarra, una planchita y diversas esponjas |
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Familia de las planchitas es este bodión (Symphodus cinereus) |
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Familia de bodiones y planchitas son los tordos de roca |
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Aquí nada un tordo de roca nada junto a un fredí hembra |
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Las hembras de fredí son muy coloridas... |
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... pero los machos lo son aún más.
Lo curioso es que las hembras adultas pueden convertirse en machos |
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Aquí dos hembras, una parece que está transformándose en macho. |
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Aquí una hembra incordia a una futarra |
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En esta foto se aprecia muy bien el diseño de su cabeza |
Con lo que me entretuve al final de ese día fue con lo que he contado en la primera foto, un pulpo, un serrano y un fredí.
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El primero en llegar a atosigar al pequeño pulpo fue el serrano |
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El que más insistió fue el espectacular fredí macho |
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Al final, creo que mi presencia dio tranquilidad al pulpito aunque él siguió intentando adoptar formas y colores que se confundiesen con el fondo.
En el vídeo siguiente, se aprecia un poco de la secuencia completa. |
Todo lo anterior fue el primer día, pero volvimos a repetir un par de días después, tras un día de fuerte viento que revolvió y enturbió el mar. Esa vez el agua no estaba tan cristalina, ya que había partículas en suspensión. Pensé que no iba a poder fotografiar casi nada, pero la sorpresa fue mayúscula, pues el mar estaba invadido de grandes bancos de peces, seguramente alimentándose de esas partículas. Es una extraña sensación estar completamente rodeado de peces.
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Las partículas daban un color turquesa al agua |
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Uno de los peces que hacían bancos son las bogas (Boops boops) |
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Aunque alguna también nadaba sola |
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Rozando la superfice había grupos de lisas bastante grandecitas |
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En las rompientes los briozoos aprovechan para capturar animales microscópicos |
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Y junto a las rompientes se agolpaban miles de pámpanos blancos (Trachinotus ovatus) |
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Plateados con las puntas de las aletas negras son muy rápidos nadando y se acercan a las personas sabedores de que no los vamos a poder tocar |
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Y bajo las rompientes se agrupan las castañuelas adultas |
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Que también pululan por el fondo |
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De adultas ya casi no conservan sus colores azules |
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Un grupo de obladas |
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Obladas por arriba y castañuelas por debajo |
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Un par de salemas y un par de raspallones |
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Salemas entre las posidonias |
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Son bastante llamativas con sus ojos y líneas amarillas |
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Lo último que vi antes de salir del agua fue esta medusa que se llama
acalefo luminiscente (Pelagia noctiluca) |
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Desde atrás se ven sus peligrosos tentáculos |
Acabo con algo de fuera del agua, para que no se diga. La zona es muy interesante por algunas formaciones muy curiosas así que también conviene caminar por sus playas y acantilados.
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Esto es un espejo de falla, que se produce cuando las rocas de cada lado de una falla o fractura se desplazan y al producirse la fricción las caras se pulen notándose incluso las líneas del movimiento y pequeños escalones de fractura. Esta se formó en una pequeña falla, la de las moreras, que está relacionada con otra más conocida por los desastres que provoca, la falla de Lorca
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Esta pequeña ciudad encantada o erosiones de Bolnuevo se han formado sobre playas fósiles erosionadas por el viento y otros agentes atmosféricos |
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Y aquí acaban las dos entradas sobre estas vacaciones. Ya estamos pensando en las siguientes...